25 mayo 2007

EL ESPAÑOL DE LA HISTORIA. Sociedad

Cuando mi madre dice que un programa de televisión es una mierda, es que lo es. Y es que tiene cierto sentido que la convierte en lo que yo llamo una “hit searcher” o una “success hunter”; vamos, una especie de detectora de éxitos de infalibilidad demostrable estadísticamente. La última vez que ha puesto ese sentido al servicio de la programación televisiva fue con este espacio en el que el populacho debíamos decidir quién había sido el español de la historia. En cuanto le echó la primera ojeada saltó automáticamente: “vaya mierda de programa”. La cosa quedó ahí; o sea, que cambiamos de canal. La verdad es que el producto no tenía ninguna buena pinta ni siquiera la mera esperanza de ofrecer algo distinto y entretenido durante ese rato que cada cual se concede para que le entre el sueño.

El secreto que cobijaba este bodrio presentado por Matías Prats no era otro que el de colocar a su Majestad el Rey Don Juan Carlos en el primer puesto de este galardón de nuevo cuño. Lo cual me parece francamente bien; no por nada sino por que uno se da cuenta de que nuestra monarquía, tan denostada por cuatro raposos comechuscos, está donde debe: en lo alto de nuestra estima. Esto se demuestra no sólo observando el lugar que ocupa el Rey, sino comprobando asimismo que en el puesto número 4 aparece doña Sofía, en el séptimo el Principe y, oh sorpresa, en el número 15 “la Leti”. Válgame Dios, que amores por la Monarquía. Faltaba Froilán!

Hasta aquí la parte jocosa. A partir de aquí el drama. Los votantes catódicos han aupado a ZP hasta el puesto número 14! Anatema! Por delante de figuras como la de Gaudí, Dalí o Goya! Y yo me pregunto, ¿qué ha hecho por España el indeseable de Zapatero?, ¿se puede saber qué lugar ocupa este mequetrefe en la Historia de España y por qué? Verdaderamente asombroso. Aunque no menos asombroso que la posición a la que este país tan ilustrado ha relegado al autor de “El tema de nuestro tiempo”, don José Ortega y Gasset, al que han aparcado en el escalón 33, a sólo 8 puestos de David Bisbal y, oh maravilla, por detrás de dos de las mujeres más ilustres de nuestra augusta Historia: Lola Flores y la Pantoja!! Sólo faltaban “cañita brava” como el español de la Historia con la mejor prosodia, “el risitas” como el español más erudito, Yurima (la otrora “Tamara”) como la mejor voz del siglo XX, y “Salsa Rosa” como el programa cultural más influyente de la Historia.

Como se puede comprobar, mi madre siempre da en el clavo en estos asuntos: “este programa es una mierda”, dijo, y efectivamente, salvo el número uno del escalafón, lo demás, como vemos, es para darse de cabezazos contra la esquina de la tele, y a poder ser, mientras el “Tomate” pone a parir a la Pantoja.

24 mayo 2007

"En democracia no hay nadie mejor que nadie; todas las ideas, todas las siglas y todos los candidatos merecen respeto. Hay que saber estar; la voluntad de la gente ha de ser siempre respetada, por respeto al adversario, porque así se respeta a los ciudadanos, a la democracia y a la libertad. No hay que escuchar a quien insulta, hay que olvidar a quien descalifica y mantener siempre ante la gente una actitud de toleracia". J. L. Rodríguez Zapatero. 10 de mayo 2007

"Los dirigentes del PP tienen principios de hojalata. Sólo han puesto la mentira y los escándalos urbanísticos". J. L. Rodríguez Zapatero. 12 de mayo 2007

"La crispación es lo que ocurre en España cuando el PP pierde unas elecciones". J. L. Rodríguez Zapatero. 13 de mayo 2007

"Nuestros adversarios generan ruido, furia y crispación. ¿Qué sería de Rajoy si no existiera ETA? Nada!". Jesús Caldera. 13 de mayo 2007

"Rajoy no pide el voto para mejorar vuestros pueblos y ciudades, sólo pide el voto para que desde sus gobiernos municipales y autonómicos se haga oposición al Gobierno de España. El PP no sólo hace oposición al Gobierno de España, lo que hace realmente es oposición a la España actual, la España de la modernidad, del progreso, de la igualdad entre hombres y mujeres, de los derechos sociales. Rajoy sólo transmite pesimismo". J. L. Rodríguez Zapatero. 14 de mayo 2007

"Los del PP son estreñidos mentales, porque no sale nada si aprietas". J. L. Fdez. Bermejo (Ministro de Justicia). 14 de mayo 2007

"El PP divide, fractura e instrumentaliza. Lo que quiere el señor Rajoy es volver al poder, sea como sea, y cueste lo que cueste. Y para conseguirlo está dispuesto a no dejar títere con cabeza". M. Teresa Fernández de la Vega. 16 mayo 2007

"La mayoría de las cosas que dice el Partido Popular no merecen ni ser escuchadas porque para eso hay que tener algo de credibilidad". J. L. Zapatero 17 de mayo 2007

"Ángel Acebes tiene un problema mental". J. L. Fdez. Bermejo (Ministro de Justicia). 18 mayo 2007

"Los dirigentes del PP son los jefes de prensa de la ETA". Alfonso Guerra. 18 mayo 2007

"Me resulta vomitivo que el PP utilice la lucha antiterrorista para hacer campaña. No hay más juego que la mentira, el engaño y la indecencia, que es lo que practica Rajoy". José Blanco. 19 mayo 2007

"Batasuna es para Rajoy el pretexto para intentar esconder que España vive en su mejor momento económico. Todo lo que dice el PP tienen una credibilidad cero". J. L. Zapatero, 20 mayo 2007

"Los del PP están enfermos y llenos de rencor". J. C. Rodríguez Ibarra. 22 mayo 2007

"Rajoy anuncia catástrofes y mete miedo a los españoles". J. L. Zapatero, 22 mayo 2007

"Aznar es un indecente y un miserable". Pachi López, 23 mayo 2007

"Votar al PP es un eligro para la convivencia". J. L. Rodríguez Zapatero, 25 mayo 2007

19 mayo 2007

CÁNDIDO EN GUANTÁNAMO. Política

Los dos hechos judiciales más graves que, a mi juicio, han tenido lugar en la legislatura de ZP han sido la retirada de los cargos contra Otegui (en aquel indecoroso y nauseabundo “váyase señor Otegui, este tribunal nada tiene contra usted; queda en libertad, puede irse”), y lo que soltó anteayer el Fiscal General del Estado sobre la lista batasuna de ANV. El augusto Cándido se apiadó, sí, se apiadó, de todos aquellos que tenían intención de votar a los “comunistas etarras” (que no “izquierda abertzale”, que ya está bien de eufemismos) avalándoles la exclamación de “no hay derecho a esto”, por lo que Conde Pumpido llegó a comentar, sin la boca pequeña, que para muchos, la ilegalización parcial de ANV es como un Guantánamo jurídico que le han llevado a pensar en si “quizás no hemos excedido”. La vergüenza que cualquier persona medianamente crítica pudo sentir al escuchar estas majaderías es de órdago a la grande. Es verdaderamente terrible.

Ningún jurista en el ejercicio de su cargo y atendiendo a criterios estrictamente legales sería capaz jamás de decir algo de esta estofa. Por eso me pregunto si el señor Fiscal haría este tipo de reflexiones en voz alta cuando desempeñaba tareas jurisdiccionales, es decir, ¿se habrá preguntado alguna vez Conde Pumpido si se le ha ido la mano tras meter a un asesino en la cárcel?, o dicho de otra forma ¿depende del número de condenados el remordimiento de habérsele ido la mano a uno a la hora de dictar sentencia?, ¿o quiere acaso decir que el TS y el TC han prevaricado como bellacos al ilegalizar las candidaturas etarras que él mismo ha solicitado, con lo que él mismo habría prevaricado también? Este tío es tonto perdido, qué le vamos a hacer. Es terrible que un señor con este cargo y responsabilidad tenga que pedirles perdón en público a esta chusma infecta en consideración exclusiva a esa siniestra expectativa de proceso que su jefe, el que le nombró, aún quiere rubricar en el momento menos pensado.

14 mayo 2007

CÁNDIDO, CANDIDEZ Y CANDIDATURAS. Política

Tras la entrevista que Cándido Conde Pumpido concedió el otro día al periódico de cabecera de su partido diciendo que aún estaban a tiempo de anular las candidaturas de ANV, le siguió, como bombilla encendida tras pulsar el interruptor, la comparecencia de Barrena pidiendo el voto para este partido papeleta en mano. A pesar de ello, el Fiscal General del Estado no tiene intención alguna de proceder judicialmente contra este partido zombi. Alega el comisario del PSOE que el hecho de que unas personas inhabilitas para ejercer cualquier cargo político pidan el sufragio para una determinada candidatura no implica necesariamente que ésta sea ilegal, como ya dejó sentado el Tribunal Constitucional a propósito de la controvertida legalidad del PCTV (las nekanes o burras, para los amigos).

El argumento del TC es perfectamente lógico. Que un delincuente pida públicamente el voto para un determinado partido, efectivamente, no ilegaliza ni afecta a la legalidad de éste. Ahora bien, la comparecencia de Barrena no es un hecho singular enjuiciable aisladamente. Al contrario: forma parte de toda una retahíla de pruebas que, sin ir más lejos, han llevado al Tribunal Supremo a ilegalizar más de un centenar de las listas de ANV no hace ni una semana. Es decir, la llamada pública del dirigente batasuno no es más que otro paso más hacia la confesión (tácita, eso sí) de que tras ANV está el entramado etarra.

El argumento del TC que tan oportunamente ha traído a colación Conde Pumpido es tan cierto como inaplicable a este caso. Imaginemos que un señor deambula por la calle con un cuchillo ensangrentado en la mano. Esto no quiere decir, de acuerdo con la tesis del Constitucional, que este caballero sea ningún asesino. Pero la cosa cambia si la policía descubre minutos después a su esposa muerta en el domicilio de ambos. El hombre es el indicio y el cuerpo cosido a cuchilladas el delito. Según la “doctrina Conde Pumpido” en tal caso no habría que proceder contra el sujeto porque la apariencia no constituye el delito.

Con el asunto de las candidaturas fantasmas de Batasuna sucede lo mismo: un delito (un partido integrado por terroristas condenados) y unos indicios que engordan cada día que pasa dando lugar a un fraude de ley más evidente.

08 mayo 2007

UN AUTO PARA LA HISTORIA. Disparates judiciales

Contra todo pronóstico, la demanda presentada contra el memo de Pepe Rubianes por haberse ciscado en la putaespaña, ha quedado archivada por arte de birli-birloque. Es una verdadera barbaridad que la jueza hay tomado esta decisión, pero mucho más bárbara es la argumentación que ha empleado para ello. Dice la magistrada que los exabruptos de Rubianes no son más que “una manifestación oral de escasos 30 segundos, absolutamente espontánea y que forma parte de la propia idiosincrasia del emisor [de Rubianes]”.

Veamos. En primer lugar ¿desde cuándo exime de responsabilidad que un insulto, injuria o ultraje (como es el caso) dure escasos segundos, sean 30, 20, ó 2? Es decir, si yo le espeto a la señá jueza que es una zorra, este improperio me cuesta pronunciarlo 1 escaso segundo, y no por ello dejaría de ser una injuria.

Segundo. ¿Desde cuándo exime de responsabilidad un ultraje de esta naturaleza por el sólo hecho de ser espontáneo? Vamos, que si yo me cago en la putacataluña, eso sí, espontáneamente, me voy de rositas.

Y tercero. Según la doctrina de este Auto evacuatorio (never better said) la idiosincrasia faltona e insultante del ultrajador le exime a éste de cualquier cargo penal. La jueza, para justificar este último extremo, que a cualquier lego iuris le podría parecer descabellado, añade que “en los 22 minutos de estancia en el plató se pueden contabilizar hasta 36 exabruptos, además de de los que son objeto de esta causa”. Vamos a ver si lo entiendo. O sea, que esta mentecata extrae el siguiente y novedoso principio general del Derecho: “la abundancia en el exabrupto exime a su profesor”. La enjuiciadora, para apuntalar la argumentación comenta que las palabras del actor gallego fueron aplaudidas por el público “enfervorecidamente”. De lo que podría extraerse otro neoprincipio legal, a saber: “el aplauso y/o la complicidad, cuando no la complacencia, del público eximen de toda responsabilidad”. Esta señá hubiera dejado pequeños a Savigny y a Hiering. Qué barbaridad! Menos mal que no crea jurisprudencia.

Y concluye la jueza: “esos comentarios no iban dirigidos a España como nación, sino a una concepción de España, diferente de la democrática y constitucional [¿se referirá a la que propugna el nacionalismo catalán?] que tienen ciertos grupos de individuos”. Eso sí, en una cosa atina la señá jueza: cuando apunta que “no puede pretenderse que todos los españoles por el hecho de serlo, hayan sido víctimas de la supuesta provocación”. Estos es cierto, pero no excluye en absoluto el desaguisado de sus argumentación.

Según la doctrina de este auto, nada malo tendría proferir los insultos citados, es decir, los de zorra y “mecagoenlaputacataluña”, ya que según la magistrada suplente lo primero sería equivalente a “mujer astuta” (lo que al fin convertiría la soez casi en un requiebro) y lo segundo equivaldría, más o menos, a “obrarse” sobre una concepción de la Cataluña anticonstitucional, nacionalista, separatista, xenófoba y excluyente. O sea, algo perfectamente legítimo (¿?).

El art.545 del Código Penal dispone: “Las ofensas de palabra, por escrito o de hecho a España […] se castigarán con multa de 7 a 12 meses”, con el agravante de “cometer el delito por motivos de discriminación referente a la ideología o nación a la que pertenezca [la víctima]” (art.22.4 Código Penal). Ya ven, tanto rodeo para circunvalar la simple y sencilla aplicación de una norma penal que no presenta más problemas de interpretación que los que una mente alambicadamente nacionalista y obtusa (como la titular de este juzgado) le quiera encontrar.

07 mayo 2007

VUELTA AL CORAZÓN DE EUROPA... Política

¡Qué estampa, madre, qué estampa! La vuelta al corazón de Europa, dijo este de el medio. ¡Qué ojo, madre, qué ojo!

La cosa es que estos dos con los que se hizo la fotito ZP ya no están, es más, nadie se acuerda de ellos porque dejaron sus respectivos paises como un solar. Ahora, el corazón de Europa, le guste o no a ZP, está compuesto por una fracasada y por un derechista. El momento idóneo de volver al corazón de Europa, ¿verdad?

Aunque no hay que desesperar. Siempre le quedarán a nuestra izquierda utopista las relaciones internacionales que corresponden a su querencia natural, a saber: Venezuela, Cuba, Marruecos, China, Guinea...

05 mayo 2007

LAS LISTAS DE LA ETA. Política

No es nada fácil entender el caos que se ha originado por la presentación de las listas batasunas a las elecciones locales del País Vasco. Los abogados del Estado, que no del Gobierno, han sido los primeros que han advertido la dificultad que supone proceder a la impugnación “por módulos” de las candidaturas abertzales. Y tienen razón, cómo no. El tema es, a primera vista, enormemente peliagudo. Ahora bien, la cuestión, como todas en el ámbito del Derecho, se hace tanto más sencilla cuanto más se simplifican los elementos de juicio. Me explico. Efectivamente, el principal inconveniente, por no decir el único, es conjugar los derechos de los ciudadanos que conforman esas listas con el del rigor, no sólo literal sino muy especialmente filosófico, de la Ley Orgánica de Partidos Políticos. El derecho de aquellos primeros no se desvirtúa en absoluto por ser hijos, padres o hermanos de los etarras. Esto debe quedar perfectamente claro. Es decir, impugnar una lista por el sólo hecho, y con el sólo argumento, de que uno de sus miembros sea un ex dirigente batasuno chirría un poco, ciertamente. Sin embargo, como digo, la cuestión se aclara bastante si simplificamos los términos del dilema, es decir, si partimos de que toda esta tormenta de candidaturas y listas sólo pretenden una cosa: vulnerar la ley, o mejor, defraudarla.

No es justo privar a unos ciudadanos de sus derechos políticos por la sola circunstancia de estar emparentados con etarras. Pero sí lo es que, sabiendo que comparten lista con miembros inhabilitados para ejercer cualquier actividad política, pretendan ampararse en sus derechos para intentar soslayar esta segunda circunstancia. Ahí está la clave del asunto. Estos ciudadanos anónimos cumplen a la perfección el molde del fraude de ley: pretenden vulnerar una ley (la de partidos) amparándose en otra (la que les autoriza a presentarse a la elección de cualquier cargo público) dada con una finalidad distinta. En resumen, la libertad de cualquier abertzale anónimo para ejercer sus derechos queda definitivamente enervada cuando concurre, a sabiendas, con individuos inhabilitados para ello. De acuerdo con esto todas las candidaturas de unas mismas siglas deberían ser impugnadas como una unidad ya que la invalidez de la candidatura se extiende a todos los que, bajo el mismo nombre, no ignoran con quienes hacen política.