Me referí ayer a la reconocida competencia del secretario de organización del PSOE. Pues bien, tras decir esto el interfecto se permitió el lujo de arrojar su mismo defecto a Fraga, tachándolo de “incapaz”.
Aunque esta calificación pudiera parecer que se sitúa dentro de un contexto y que dicho apelativo pueda referirse más que a una incapacidad a una incompetencia, no puede pasarse por alto que el ilustre socialista dejó caer este cariñoso calificativo sirviéndose de la avanzada edad de presidente gallego.
Con independencia de la actitud política de Fraga, de la se prodrían realizar varias objeciones, nadie puede negar que sigue siendo una persona con una capacidad intelectual que supera a la de muchos de sus colegas de profesión, aun cuando éstos tengan la mitad de años que aquel. Además, si hay alguien en el partido socialista que supera al resto de sus compañeros en incapacidad (y eso es decir mucho) es precisamente este celebérrimo secretario de des-organización de los de Ferraz. Un consejo: señor Bianco, mírese al espejo, así evitará reprochar a los demás aquello de lo que usted es víctima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario